Historias

Una canción con alguien es algo tan sumamente significativo como el valor de una historia en común. Las canciones se componen de notas, las historias, de puntos. Hay puntos y a parte, punto y seguido, puntos suspensivos, puntos volátiles, puntos y puntos que apartan las canciones del maldito punto y final. En mi historia siempre hay lágrimas cuando alguien que quiero se va, de un modo u otro. Son puntos basados en edificios que siguen alguna teoría alemana y fotos, muchas fotos, pasadas por agua y diferentes historias que me arrastran de nuevo a decir adiós junto a una estación de tren. Cuando afilo mis lápices para poner puntos, siempre escucho canciones que acaban vinculándome a un determinado y particular modo de decir las dos palabras más difíciles del mundo, las que se dicen con los ojos, las manos, los hechos, las notas de las canciones. Cuando todos nos vamos de un sitio, siempre retumban en mis oídos. Ahora pongo un punto y seguido, aunque suene un tema en común y, de nuevo, la nostalgia que aún no ha llegado comienza a despiadarse... Punto y a parte, amigo. Recordando la complicidad de un festival. Punto y seguido en las calles de Berlín, donde siempre suenan canciones en común y la luz nunca se apaga ♥

2 comentarios:

Cohen dijo...

a veces, solo a veces, gran amor

R. dijo...

por qué motivo hacía tanto que no entraba en tu blog?
Ahora me lo estoy tragando de arriba a abajo, y no veas qué bien :)
un placer entrar por aquí,
inspirador 100%
muac!