Donde

Aunque parezca que estamos en el artártico, tirito. Siento como las paredes me azotan cuando suena la canción que me transporta a la muerte. Se llevan todo, la noche y el día, y yo, eje de una rueda, giro haciendo ruido golpeando sobre las piedras. Guárdame el mundo en el bolsillo que creo que dormiré mientras todos los ciclos pasan volando, como un susurro. En distintos lapsos, las niñas recaen y renuevan, con las mismas cuerdas que anclan. todo es demasiado largo. Y yo, esta noche, me voy de concierto...

1 comentario:

Motor Psico dijo...

que lindo :)
te deseo lo mejor